Respuesta: ^^the Hot Line LGTB ^^ Bueno, solo hasta ahora tuve el tiempo y el espacio para sentarme a dar una opinión sobre lo que escribió el compañero Volko en los últimos párrafos de su anterior comentario:
No es descabellado lo que dices. No se si sea por la existencia de ciertas sustancias en el ambiente como lo refieres en tu comentario, o cual sea la causa, pero pareciera que por predisposición genética, los varones que vienen naciendo de hace unos 15 o 20 años para acá, tienen tendencia a ser más "femeninos", y ojo, que con esto no quiero decir que necesariamente sean gays, ni que se conviertan en trannys ni nada de eso.
Me refiero a que tienden, por genotipo, a tener rasgos más femeninos que masculinos. Por eso es que hoy en día uno ve tanto pelaíto de 15 o 17 años todo flaco, desgarbado, con los hombros estrechos, con espalda angosta, etc, etc, etc; a comparación de cuando uno se desarrolló, que los hombros se ensanchaban rápido, el mentón se volvía mas prominente, la manzana de adán, entre otras características.
Tanto así que a los adolescentes de hoy en día, es hasta normal verlos lampiños en las piernas, y esa era una de las cosas que mas se empezaba a notar después de que uno cumplía 14 o 15 años.
Definitivamente no es descabellado ni alejado de la realidad lo que dices, amigo Volko.
Vaya uno a saber por que esa predisposición genética que no se veía hace 25 o 30 años, pero lo que si es cierto, es que es un fenómenos que se ve mucho más hoy en día, y por eso es que estas últimas "camadas" de trannys que vemos por ahí, es que son tan femeninas desde que empiezan su transformación.
Quizás eso también seguramente ayuda a que no necesiten meter tanta hormona para ser mucho más femeninas, por ende, mientras menos hormonas ingieran, menos se veran afectados sus genitales (uno de los efectos es reducción del tamaño de los testículos) y lógicamente, no se perdería mucho la apariencia y cantidad de su semen.
__________________ God let me die with my sword in my hand... Haber caído tanto y no haber aprendido nada – ese es tu fracaso. Es bueno conocer la historia para que no se repita... Aquí, los primeros tres capítulos del libro "La Pena Máxima, un Juicio al Fútbol Colombiano". |